La investigación se realiza en las instalaciones del Sanatorio Allende. Se trata de la vacuna canadiense contra el Covid-19 cuya tecnología tiene rápida capacidad de adaptación contra nuevas variantes del virus y podría usarse también para vacunas de otras patologías.
Un nuevo avance en cuanto a vacunas se está llevando a cabo en Córdoba. Según explica la propia empresa a cargo, la biofarmacéutica canadiense Medicago, la particularidad de ésta es su origen vegetal, ya que utiliza plantas vivas como biorreactores para reproducir una partícula no infecciosa, que imita al virus que se busca neutralizar.
En este caso, la planta es de tabaco (N. Benthamiana) —utilizada en virología vegetal—, a partir de la cual se intenta generar una respuesta inmune sin riesgo de infección.
“Esto es un hito porque se ha aprobado una vacuna que se estudia en Argentina, fundamentalmente en Córdoba y se trata de una nueva tecnología de desarrollo que usa como antígeno una proteína de origen vegetal”, expresó al medio La Nueva Mañana el médico virólogo e investigador Fernando Riera quien desde el Sanatorio Allende, está al frente del estudio fase III.
Se trata de la Covifenz desarrollada contra el Sars-Cov-2 por la -que es pionera en la terapia derivadas de plantas-, junto a la farmacéutica británica GlaxoSmithKline GSK).
En el estudio, que inició en 2021 la etapa de prueba en voluntarios, participaron más de 24.000 personas de todo el mundo, de los cuales más de un 37% son argentinos. En ese marco, un equipo de 50 profesionales del Sanatorio Allende, incluyó 800 participantes y continúa trabajando en las fases finales de la investigación que incluirá la inoculación al grupo que recibió la dosis placebo.
Para la elaboración de esta vacuna contra el coronavirus se utilizan plantas de Nicotiana benthamiana, que es el hospedador experimental más usado en virología vegetal, principalmente por la gran cantidad de virus que pueden infectarlo con éxito.
“En casi un año de estudio, la vacuna demostró ser segura y una eficacia superior al 71% para la prevención de la enfermedad por Covid-19”, expresó el virólogo y sobre las ventajas de Covifenz sobre las vacunas basadas en tecnologías anteriores, indicó a ese medio: “se puede producir en poco tiempo y es una vacuna fácilmente transportable que no necesita de temperaturas extremas bajo cero, sino que con el frío de la heladera se conserva y es segura y eficaz, lo cual es lo más importante”.
El investigador además aportó que otra de las ventajas que tiene esta vacuna vegetal, es la “plasticidad”, es decir que se puede adaptar más rápido a nuevas variantes del coronavirus ya que a diferencia de las otras plataformas, que utilizan el adenovirus, se inocula la planta con partículas del ARN -material genético- del virus y como las plantas funcionan como ‘una fábrica’, reproducen de a miles estas partículas que son similares al virus y cuando son procesadas -en cosas muy chiquitas, que se llaman nanopartículas-, y son inyectadas en seres humanos, hacen que el sistema inmune genere anticuerpos e inmunidad humoral y celular.
En cuanto a los datos preliminares de la vacuna, ante las distintas variantes de coronavirus, publicados por Medicago y KSG en diciembre del año pasado, se indicó que ante Delta la vacuna probada en seis países, reportó una eficacia del 75,3%, para Gamma el 88,6%, demostrando una eficacia global del 71%. Cabe destacar que en el momento de iniciada la fase III de la investigación el 16 de marzo de 2021 la variante Ómicron todavía no estaba presente.
En febrero de este año, el Ministerio de Salud canadiense anunció la aprobación de la vacuna y autorizó su uso en dicho país para su aplicación en personas entre 18 y 64 años que consta de dos dosis con intervalos de 21 días.
No obstante, aún no ha sido aprobada para su uso en otros países incluida Argentina, se espera avanzar con las gestiones y que la Anmat de vía verde para incluirla entre las opciones para la población. “Canadá es el primer país que la aprueba y es muy prometedor porque también van a llegar nuevas vacunas con esta tecnología, por ejemplo, para gripe”, agrega Riera.