Un nuevo aniversario
En la actualidad, transitar diferentes sectores de la costa miramarense con esta gran bajante, obliga a observar gran cantidad de escombros que llevan al visitante a plantear diferentes interrogantes: ¿Que paso? ¿Cuándo paso? ¿Por qué paso? . O comentarios del tipo : “Quizás hubiera sido mejor dejar las casas de pié a estos escombros” “Deberían limpiar”, “Que lastima todo tan dejado”.
Eso que se ve, es parte de nuestro pasado no tan lejano, se entiende, por ahí no es atractivo a la vista pero es historia. A comienzos de la década de 1990, ingresar a Miramar era adentrarse en dos realidades diferentes: hacia la laguna yacían inertes diferentes experiencias, anécdotas y la historia de vida de una comunidad aguerrida que cayó inexorablemente ante una nueva embestida de la Mar.Con calles que empezaban o terminaban en la laguna.
Un pueblo, carente de vida, asomaba de las aguas de la Mar Chiquita, ese mismo espejo de agua que le había dado vida y se la había quitado por segunda vez.
Bajo la intendencia del señor Daniel Cerutti, se tomaron decisiones trascendentales que cambiaron el rumbo de nuestra historia. Había que demoler, sepultar ese pasado de esplendor en ruinas que tanto dolía. Tomar la tan difícil decisión de un cambio que marcaría de un modo definitivo nuestro futuro como comunidad.
Se podrá confrontar y tener opiniones encontradas ya que cada acción implica una consecuencia, lo que no se discute es el después de dicha decisión.
Las imágenes hablan por sí solas, las irrecuperables estructuras, entristecían a propios y extraños. Muchas de aquellas familias inundadas emigraron para no volver, detenerse en su ribera con ese panorama emergente, era revivir la perdida material, años de trabajo incansable, secuelas psicológicas y penas difíciles de sobrellevar…
El 15 de septiembre de 1992, siendo la 13:45hs, Autoridades locales y Provinciales junto al Tercer Cuerpo de Ejército, Bomberos Voluntarios de Balnearia y la región, medios periodísticos de todo el país y una conmovida comunidad, se produjo la primera demolición controlada.Ante la detonación, el silencio y las lágrimas se apoderaron del momento, no solo vibraron las estructuras y el piso, se estrujo el corazón y el alma, los recuerdos agolpados, añoranzas de un tiempo de esplendor.
Día a día se cumplió con el objetivo, sepultar un pasado que dolía para emprender un futuro con más fuerzas, más proyectos, recuperando un horizonte con su puesta de sol libre de fantasmas.
Hoy se conmemora un nuevo aniversario… ¿Vos? Tenes algún recuerdo de ese momento???
Esto pasó en Miramar hace 29 años atrás…
Fuente Facebook: Había Una Vez