Luego del brote de dengue, se espera para mayo el pico de enfermedades respiratorias. Recomiendan la vacunación que es gratuita y está disponible en la red de vacunatorios.
Con la llegada del frío se intensifican las consultas médicas sobre cuadros gripales en la sociedad en general. Es importante resaltar que hay grupos que se ven afectados de manera más severa ante este tipo de enfermedades como adultos mayores, infancias y pacientes con enfermedades crónicas.
La vacunación es una herramienta fundamental para lograr una inmunidad que sea capaz de prevenir infecciones potencialmente muy graves en infancias y adolescencias. Desde el Ministerio de Salud provincial lanzan cada año campañas de vacunación antigripal con el objetivo de avanzar con la inoculación antes de que comience la circulación del virus influenza. La vacuna es gratuita y obligatoria. En Córdoba comenzó en marzo la campaña y las dosis están disponibles en la red de vacunatorios. La población objetivo, infancias de 6 a 24 meses de edad, personas embarazadas (en cualquier trimestre de la gestación), personas con factores de riesgo entre los 2 y 64 años de edad, mayores de 65 años, personal estratégico y equipos de salud, pueden asistir a cualquier punto de vacunación.
La vacunación reduce los riesgos
¿Qué pasa con el resto de la población? “Siempre hay que evaluar las condiciones preexistentes. Para el resto es una cuestión optativa, no es una exigencia. La vacuna está indicada especialmente para la población objetivo”, respondió Miguel Díaz, director del hospital Rawson, en una entrevista con La Nueva Mañana.
La gripe influenza es una enfermedad viral respiratoria que se presenta habitualmente los meses más fríos del año. La misma se transmite de una persona a otra fundamentalmente por las gotitas que emanan al toser o estornudar. La mayoría de las personas afectadas se recupera en unos días, sin embargo las personas que están dentro de la población objetivo antes mencionada puede ser más complicada. La vacuna antigripal reduce las hospitalizaciones, secuelas y muertes ocasionadas por este virus.
Adultos mayores, infancias y personas con enfermedades preexistentes, en el foco
En adultos mayores e infancias la infección de la gripe es más grave por una disminución de la inmunidad. Esto podría derivar en complicaciones graves como otitis o cuadros de neumonía. Sucedió con el Covid- 19 y con la epidemia de gripe de 2009. También, las enfermedades como la obesidad, hipertensión, cardiopatías, diagnósticos pulmonares o renales crean un factor propicio para que estas infecciones tengan mala evolución. Igual sucede con las edades extremas de la vida. Por eso es que la vacuna de la gripe está indicada fundamentalmente en esta población.
Desde el sector de la pedriatría, Miriam Calvari, subdirectora del Hospital Pediátrico explicó que aún no estamos en el inicio del pico de las infecciones respiratorias porque todavía no llegó la época más fría. “Las consultas que tenemos son más de crisis asmáticas por el clima que estamos teniendo. Algunos casos de niños menores de un año con bronquiolitis por un virus respiratorio sincitial. A medida que ingresemos a invierno vamos a tener más casos de infecciones y estaremos en el pico posiblemente en el mes de mayo”, dijo la médica.
En cuanto a las recomendaciones, Miriam enfatizó en el lavado de mano de manera frecuente, ventilar la casa, evitar la contaminación de los espacios fundamentalmente el humo del cigarrillo, evitar el contacto con personas enfermas, priorizar la lactancia materna, cubrirse con el codo al toser o estornudar. “La más importante es la prevención con vacunas. Una es la antigripal que es gratuita y obligatoria, está en el calendario de niños sanos de seis meses a dos años de edad”, dijo y explicó que la primera vez se colocan dos dosis con un intervalo de un mes entre cada una y luego una dosis anual. Sumó además completar el calendario con la vacuna para el neumococo y la de la tos convulsa.
El dengue, presente
Actualmente, de los cuadros febriles que llegan a las guardias, la mayoría corresponde a dengue, según lo explica Miguel Díaz. Los antecedentes demuestran que generalmente luego de la época del dengue, aumentan los cuadros respiratorios. Se superpone el inicio de uno y la finalización de otro. Ha sido así a lo largo de los brotes una constante en la sociedad.
La pandemia ha marcado un antes y un después en el reconocimiento de acciones de cuidado ante virus que pueden afectar nuestra salud. Las políticas de prevención difundidas por el Ministerio de Salud con la llegada del coronavirus se instalaron en la sociedad y muchas de ellas desde ese entonces forman parte de nuestra vida cotidiana. Muchos aún conservan la botellita de alcohol en gel en sus bolsos, el lavado frecuente de manos, toser o estornudar en el codo, entre otros. “Lo fue en la pandemia y es también ahora, las vacunas han demostrado cobrar eficacia, son útiles y necesarias”, aseguró Díaz.
“Tenemos una muy baja tasa de Covid”
Aunque la exposición es menor, el Covid 19 no se ha ido. “Tenemos una muy baja tasa de casos. Pero sabemos que la pandemia aún no terminó y vamos a ver qué pasa este año en relación a cómo es la circulación viral. En base a eso se verá. Sabemos que el impacto de la vacunación es muy grande y el impacto que tuvo la enfermedad en muchas personas ha generado una inmunidad de rebaño. Pero veremos qué pasa ahora que se acercan las épocas más frías y si puede comenzar a circular de nuevo el Covid u otros virus más”, concluyó el director del Rawson.
Ante síntomas como la fiebre, dificultad para respirar, resfrío, malestar, decaimiento se recomienda recurrir a un médico para que le recomiende una medicación precisa. Hacer reposo, tomar agua y no automedicarse.
Fuente: lmdiario