Se recuerda un particular récord alcanzado por una pareja de Tailandia en 2013, con el que entraron al Guinness.
Un llamativo récord de larga duración, de peculiares características, le dio origen al ya institucionalizado Día Internacional del Beso, la forma en que el mundo celebra una de las manifestaciones de amor y cariño por excelencia, que tiene su fecha establecida cada 13 de abril.
De hecho, ese beso protagonizado por una pareja de Tailandia no ingresa entre los más famosos y populares de la historia, entre los que emergen algunos que fueron captados en forma espontánea por lentes de fotos y videos, como también los prefabricados como parte de escenas memorables de películas de cine como de series y novelas de televisión.
Para la Real Academia Española (RAE), el verbo besar representa “tocar u oprimir con un movimiento de labios a alguien o algo como expresión de amor, deseo o reverencia, o como saludo”, en lo que se refiere a la acción que contempla un contacto.
Fue esta acepción carnal la que emprendieron un hombre y una mujer oriundos de Tailandia para generar un récord mundial, despertar la atención y ser fuente de inspiración para que se creara el Día Internacional del Beso, una celebración que tiene menos de una década.
En tiempos de la pandemia de coronavirus, la acción de besarse ha quedado algo relegada, sobre todo entre personas que no integran el círculo de contacto cotidiano, ya que la alta contagiosidad delCovid-19a través de la saliva motivó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconsejara dar besos.
Día Internacional del Beso: por qué el 13 de abril
Pero aun en tiempos de pandemia, el Día Internacional del Beso seguirá siendo el 13 de abril. Se festeja en este día en homenaje a una pareja tailandesa que se impuso en un concurso, en 2013, con el beso más largo de la historia: se extendió por 58 horas, 35 minutos y 58 segundos y entraron al Guinness de los récords.
Quienes estuvieron casi dos días y medio besándose son Ekkachi y Laksana Tiranarat, un guardia de seguridad de 44 años y su esposa, de 33. Cuando fijaron esta marca, derrotaron a una pareja gay que desistió de seguir a los besos dos minutos antes que ellos.
Qué generan los besos en el organismoAl momento del beso, el cerebro produce oxitocina, la hormona del amor. Se genera en el sistema nervioso central, concretamente en el hipotálamo. Desde allí se transfiere a la hipófisis, una glándula que está en nuestro cerebro, donde se almacena y de allí se secreta cuando se necesita.
Esta hormona influye en funciones donde se establece un lazo entre dos personas, como el enamoramiento, el orgasmo, el parto y el amamantamiento, y está asociada con la afectividad, la ternura o el tacto cariñoso. Al besar, el cerebro también libera endorfinas, a las que se atribuye que combaten el desánimo y evitan caer en la depresión.
Un estudio realizado por la Universidad de Viena demostró que, cuando una persona funde los labios con su pareja en un beso apasionado, las pulsaciones cardíacas pasan de 60 hasta 130 por minuto, se libera adrenalina y baja el colesterol. Se sabe que, a la hora de besar, se contraen 29 músculos de la cara.