La investigación publicada en la revista científica la revista “Obstetrics & Gynecology” demostró que las mujeres inmunizadas frente al SARS-CoV-2 presentaron cambios en el ciclo reproductivo femenino.
Un nuevo estudio encontró la relación que existe entre la vacuna contra el COVID-19 y las alteraciones en el ciclo menstrual, un efecto secundario que afecta a miles de mujeres en el mundo pero que, hasta el momento, no se había podido explicar.
La vacuna contra el SARS-CoV-2 parece tener consecuencias en la menstruación de aquellas mujeres que la reciben, una sospecha que apareció por primera vez a mediados de 2021. Así lo confirmó una investigación científica publicada en la revista “Obstetrics & Gynecology” que demuestra la relación que existe entre la vacunación y los cambios en la menstruación.
Los resultados de este estudio, impulsado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver (NICHD por sus siglas en inglés), y la Oficina de Investigación sobre la Salud de la Mujer de los NIH de Estados Unidos, comprueban que las mujeres inmunizadas contra la Covid-19 con al menos una dosis de la vacuna experimentaron un aumento de casi un día en la duración de su ciclo menstrual durante un único periodo, en comparación aquellas que no fueron inmunizadas.
Sin embargo, Alison Edelman, doctora de la Universidad de Salud y Ciencias de Oregón e investigadora principal de este trabajo, aseguró que el incremento detectado se enmarca en el rango de variabilidad normal, ya que el estudio confirmó la constancia del número medio de días de sangrado pese al incremento del ciclo menstrual.
La investigación
El relevamiento incluyó a residentes de Estados Unidos de entre 18 y 45 años de edad, con ciclos de menstruación de duración normal (de 24 a 38 días) durante tres ciclos consecutivos antes de la primera dosis de la vacuna; seguidos, después, de ciclos con dosis de la vacuna (de 4 a 6), mientras que de las personas menstruantes que no estaban vacunadas, seis ciclos durante un período similar.
Para realizar este trabajo, los investigadores evaluaron un total de 23.754 ciclos menstruales de 3.959 mujeres (de ellas, 2.403 estaban vacunadas). La mayoría de las participantes habían sido inoculadas con vacunas ARNm, ya sea Pfizer-BioNTech o Moderna.
A partir de esta información, el grupo de científicos a cargo del proyecto calculó el cambio promedio de cada persona en su ciclo y duración. Al final, usaron modelos de efectos mixtos para calcular la diferencia en el cambio en el ciclo y la duración de la menstruación entre el grupo vacunado y el no vacunado.
Según informó la publicación, un 10% de estas mujeres experimentaron un cambio en la duración del ciclo de ocho días o más, si bien esa variación se atenuó en los dos ciclos menstruales que siguieron a la vacunación. Los autores puntualizan que la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia clasifica una variación en la duración del ciclo como normal si es menor de ocho días.
“Resulta tranquilizador que el estudio haya encontrado solo un pequeño cambio menstrual temporal en las mujeres”, insiste Diana W. Bianchi, directora de NICHD. En tanto, Eunice Kennedy Shriver de NIHE explicó: “Estos resultados brindan, por primera vez, la oportunidad de asesorar a las mujeres sobre qué esperar de la vacunación de la covid-19 para que puedan planificar en consecuencia”.
Aunque el motivo exacto de estos cambios en la menstruación femenina todavía faltan aclararse, los investigadores apuntan al hecho de que las vacunas de ARNm “crean una fuerte respuesta inmune o estresante, que podría afectar temporalmente el eje hipotalámico-pituitario-ovárico si llega a sincronizarse. Nuestros hallazgos en los individuos que recibieron dos dosis en un solo ciclo apoyan esta hipótesis”.
Fuente: Crónica